En una reunión celebrada en Panamá, organizaciones de varios países latinoamericanos analizaron la problemática de la contaminación por plásticos y compartieron estrategias para enfrentarla. Esta iniciativa busca contribuir al desarrollo de un tratado global que aborde eficazmente este desafío ambiental.
Alberto Quesada de la Fundación Mar Viva:
“El problema de la contaminación por plásticos, es un problema de complejas dimensiones, pone en peligro a las comunidades más vulnerables, especialmente en la región de América Latina y el Caribe, afecta diversos derechos humanos reconocidos como a un ambiente sano y ecológicamente equilibrado y el derecho a la salud. Cualquier estrategia de intervención deberá comenzar por reducir la producción de polímeros plásticos primarios y la prohibición de sustancias químicas peligrosas presentes en todos los plásticos”.
Según Cecilia Bianco de Taller Ecologista, Argentina, actualmente más de 16.000 sustancias químicas son utilizadas por la industria en sus polímeros y productos plásticos y en los procesos de fabricación. Entre estas sustancias se encuentran algunas que tienen la capacidad de bioacumularse, persistir en el ambiente, afectar el sistema hormonal, entre otras características que hacen que sean un peligro para la salud y el ambiente. Por lo tanto, es necesario que se establezca en el Tratado un sistema de transparencia y trazabilidad de las sustancias químicas. La industria debe informar sobre la presencia y el tipo de sustancias en los productos plásticos y también poder hacer un seguimiento de éstas. Todo plástico con sustancias tóxicas debe ser retirado inmediatamente del mercado.
Para Marisol Landau, de la organización panameña FAS PANAMÁ, “Urge informar a la ciudadanía en general sobre la gravedad del problema y cómo la contaminación por plásticos pone en riesgo la vida como la conocemos. Lograr presionar de abajo hacia arriba requiere que la población esté bien informada para que tome consciencia de la situación y adopte cuanto antes prácticas y estilo de vida donde imaginemos un mundo sin plástico. Sabemos que será difícil, sin embargo, en la medida que logremos divulgar esta verdad y contemos con información confiable basada en evidencia, se podrán sumar más organizaciones en la tarea de sensibilizar y comunicar, fortaleciendo una acción colectiva que rompa la ola de los plásticos. Por esta razón, resulta de gran importancia la participación de la academia en el encuentro.”
Para Alejandra Parra de la Red de Acción por los Derechos Ambientales, la Alianza Basura Cero Chile y GAIA (Global Alliance for Incinerator Alternatives): “La crisis que han generado los plásticos es tal, que los gobiernos de todo el mundo tomaron en 2022 la decisión de comenzar a redactar un tratado para detener la contaminación por plásticos. En los casi dos años de negociaciones del tratado hasta ahora, la industria petroquímica ha incidido cada vez con más fuerza en el proceso, enviando más lobistas que los representantes de 70 países juntos en el INC-3. Por eso, urge que como ciudadanía hagamos el contrapeso y le exijamos a nuestros gobiernos que apoyen el establecimiento de metas globales y obligatorias de reducción de la producción, entre otras medidas fundamentales para lograr un tratado efectivo que defienda los derechos humanos, la salud de las personas y sobre todo de las niñas, niños y futuras generaciones que recibirán un planeta saturado de contaminantes si no cambiamos la dirección de la humanidad hoy.”
Deja un comentario
Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos estan marcados con *