La Fundación LLYC cambia su nombre a Fundación José Antonio Llorente en homenaje al fundador y su legado transformador. Bajo la nueva dirección de Irene Rodríguez, la fundación centrará su estrategia en la alfabetización digital y proyectos para niños y jóvenes, con un enfoque en la inclusión y el empoderamiento social. En 2023, sus iniciativas beneficiaron a 1.376 personas, ampliando su impacto en más de 38 organizaciones.
Renombrada como Fundación José Antonio Llorente, la institución prioriza el empoderamiento juvenil y la inclusión
(11/Oct/2024 – Panama24Horas web) Panamá.- La Fundación LLYC ha cambiado oficialmente su nombre a Fundación José Antonio Llorente, en reconocimiento al fundador de la firma y su legado transformador. José Antonio Llorente, un líder visionario en el ámbito de la comunicación, creía en el poder de esta herramienta para generar cambios sociales y apostar por las nuevas generaciones como motor de progreso. Este cambio de nombre refuerza su compromiso con la inclusión social, utilizando la tecnología como medio para empoderar a niños y jóvenes.
La Fundación, que fue creada en 2016 por Llorente, ha desempeñado un papel crucial en la promoción de proyectos que utilizan el talento y la experiencia de los profesionales de LLYC para generar un impacto social positivo. En este contexto, Irene Rodríguez ha sido nombrada nueva presidenta de la fundación, y será acompañada en esta nueva etapa por un equipo de patronos que incluye a Francisco Sánchez-Rivas, Mara Llorente, Luisa García, Ibo Sanz, Luis Martín, Teresa Rey, Juan Eduardo Hernández y María Claudia Gnecco.
Irene Rodríguez destacó la importancia de la comunicación como herramienta de transformación: «Vamos a seguir generando valor social a través del Marketing y Corporate Affairs, con la firme convicción de que la comunicación es una herramienta poderosa que genera entendimiento y confianza entre personas, empresas e instituciones, fundamentales para el progreso económico y social. Ese es el gran legado que nos deja José Antonio», afirmó.
En los próximos tres años, la Fundación José Antonio Llorente se enfocará en fomentar la tecnología entre niños y jóvenes, con proyectos centrados en la alfabetización digital y en el uso responsable de la misma, en un esfuerzo por brindarles las herramientas necesarias para un futuro exitoso.
Impacto social de la Fundación
En 2023, la Fundación llevó a cabo proyectos que beneficiaron a 1.376 personas en 38 organizaciones, un incremento de casi el 60% en comparación con el año anterior. Además, contó con la participación de 22 supervoluntarios y 452 voluntarios provenientes de todas las oficinas de LLYC, quienes colaboraron en diversas iniciativas de impacto social.
Uno de los proyectos globales más destacados es “Voces Futuras”, que busca reforzar las habilidades de comunicación y oratoria de menores en riesgo de exclusión social. A través del voluntariado de profesionales de LLYC, esta iniciativa ha ayudado a más de 1.500 jóvenes vulnerables desde 2019, brindándoles herramientas para completar sus estudios y acceder al mercado laboral, con el objetivo de romper el ciclo de pobreza.
En México, la Fundación también lanzó en 2023 el proyecto “Puertas de Esperanza”, en colaboración con la Galería Hilario Galguera, para dar visibilidad a las historias de personas del colectivo LGTBIQ+. A través de puertas transformadas en lienzos, siete artistas reconocidos interpretaron las historias de resiliencia de estas personas, reflejando las barreras y oportunidades que enfrentaron en su búsqueda por la autenticidad.
Otro proyecto de gran relevancia social es “Transparentes”, en colaboración con REDI (Red Empresarial por la Diversidad e Inclusión LGTBI) y la Fundación 26 de Diciembre. Esta iniciativa se llevó a cabo para visibilizar los desafíos de inserción laboral del colectivo trans en España, contribuyendo a su contratación y mejorando sus oportunidades de desarrollo profesional.
Legado de José Antonio Llorente
Alejandro Romero, Socio y CEO Global de LLYC, destacó el legado de José Antonio Llorente en la fundación: “José Antonio siempre creyó en este proyecto. Generó oportunidades de crecimiento para los jóvenes, viendo en ellos no solo el futuro de LLYC sino también una fuente constante de innovación y energía para la sociedad. Su entendimiento del liderazgo, su capacidad de anticipar el futuro y su apuesta por la juventud nos han guiado y nos seguirán guiando en los años venideros. Nos enseñó que el verdadero éxito se mide por el impacto positivo que dejamos en los demás y en el mundo”.
El cambio de nombre de la Fundación LLYC a Fundación José Antonio Llorente es una reafirmación de este legado, con un enfoque renovado en la tecnología como herramienta para el cambio y en la juventud como el futuro de la transformación social.
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