Expertos en la industria de América Latina debaten sobre las implicaciones de la Ley de Inteligencia Artificial de la Unión Europea y la urgencia de una legislación similar en la región. ¿Cómo se preparan los gobiernos para regular la IA y prevenir sus posibles riesgos?
La regulación de la IA en América Latina enfrenta desafíos significativos ante el rápido avance de la tecnología
¿Cómo pueden los gobiernos y las empresas adaptarse para garantizar un uso ético y responsable de la IA?
La llegada de la Ley de Inteligencia Artificial (IA) en la Unión Europea (UE) ha despertado un profundo interés en América Latina, donde los debates sobre la necesidad de una legislación similar han tomado protagonismo entre expertos de la industria.
Las limitaciones en el uso de esta tecnología y los debates sobre su regulación son algunos de los temas que acaparan la atención y el análisis de los especialistas. La IA ha demostrado su impacto significativo en diversos sectores como la salud, educación, industria y recursos humanos, con desarrollos sorprendentes a nivel mundial. Sin embargo, también ha revelado su lado vulnerable, con incidentes relacionados con delitos financieros, usurpación de identidad y aspectos vinculados a la propiedad intelectual, lo que ha subrayado la importancia de una regulación adecuada.
En diciembre de 2023, la UE marcó un hito histórico al consensuar la primera Ley de Inteligencia Artificial, conocida como «IA Act», la cual está programada para entrar en vigencia a fines de 2026. Este paso ha generado reflexiones sobre la capacidad de los gobiernos para controlar y regular los efectos asociados a la IA, tal como lo menciona Federico dos Reis, CEO de INFORM Latam.
Dos Reis enfatiza la necesidad de cambiar la forma en que se legisla, abogando por una mayor premura y agilidad en la aprobación de leyes que aborden los desafíos éticos y de seguridad planteados por la IA. Además, destaca la importancia de adoptar un enfoque preventivo en lugar de reactivo frente a los avances tecnológicos.
En el marco de la conformación de la Ley de IA de la UE, se ha discutido ampliamente la importancia de regular los sistemas de inteligencia artificial generativa, como ChatGPT, para garantizar la transparencia y gestionar los riesgos. Esta legislación establece criterios de transparencia y obligaciones más estrictas para los modelos de «alto impacto», como evaluaciones de riesgos y garantías de ciberseguridad.
Sin embargo, la regulación de la IA no está exenta de desafíos, como señala la Organización de las Naciones Unidas, que advierte sobre los efectos negativos que puede conllevar, como la desinformación, el sesgo y la discriminación. Ante esto, el desafío radica en alcanzar un consenso sobre la regulación que guíe el desarrollo y la implementación de la IA en línea con los Objetivos Globales establecidos.
Aunque países como China y Estados Unidos ya han comenzado a regular el uso de la IA, Dos Reis destaca la necesidad de adoptar un enfoque global, dada la naturaleza transfronteriza de esta tecnología. En INFORM Latam, se promueve un enfoque transparente y responsable de la IA, donde la última decisión siempre recae en las personas, permitiendo la obviedad de sugerencias o propuestas realizadas por el sistema.
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