El significado y la tradición del Viernes Santo: Reflexiones sobre la conmemoración de la crucifixión de Jesús

El Viernes Santo es uno de los días más importantes dentro de la celebración de la Semana Santa, una festividad religiosa que conmemora la crucifixión de Jesús y su muerte en la cruz, según la tradición cristiana. Este día es observado con solemnidad y reflexión en diferentes partes del mundo, incluyendo Panamá, donde los fieles participan en diversas actividades religiosas para recordar y meditar sobre el sacrificio de Jesús en la cruz.

(7/Abr/2023 – web) Panamá.- El Viernes Santo es una fecha de gran significado para los cristianos de todo el mundo, ya que marca la conmemoración de la crucifixión de Jesús y su posterior muerte en la cruz. Es un día de reflexión, meditación y recogimiento, en el que los creyentes realizan diversas prácticas religiosas para recordar el sacrificio de Jesús en favor de la humanidad. En este artículo, exploraremos el significado y la tradición del Viernes Santo, así como algunas de las prácticas y ceremonias que se llevan a cabo en esta fecha.

La historia del Viernes Santo se remonta a más de 2000 años atrás, cuando según S. JUAN 19 -el cuarto de los evangelios canónicos constitutivos del Nuevo Testamento-, en el que relata que Jesús fue arrestado y condenado a muerte por crucifixión. Según la creencia cristiana, Jesús, el Hijo de Dios, se sacrificó para redimir los pecados de la humanidad y abrir el camino hacia la salvación. Por lo tanto, el Viernes Santo es un día de reflexión, penitencia y adoración para los cristianos, quienes conmemoran la pasión y muerte de la crucifixión de Jesús.

Tradición

Según la tradición cristiana, el Viernes Santo conmemora el día en que Jesús fue arrestado, juzgado, flagelado y finalmente crucificado en el monte Gólgota, en Jerusalén. Jesús murió en la cruz como un acto de amor y redención hacia la humanidad, sacrificándose para salvar a la humanidad del pecado y la condenación. La crucifixión de Jesús es considerada uno de los eventos más importantes en la teología cristiana, ya que marca el cumplimiento de las profecías del Antiguo Testamento sobre el Mesías y el comienzo de la redención de la humanidad.

En el Viernes Santo, los creyentes cristianos participan en diversas prácticas religiosas para conmemorar la crucifixión de Jesús. Una de las prácticas más comunes es el servicio de la Pasión, en el que se lee y medita sobre los pasajes bíblicos que relatan los eventos de la crucifixión. En muchas iglesias, se realizan procesiones especiales en las que se lleva en andas una representación de la cruz de Jesús, a menudo adornada con flores y velas, como símbolo de reverencia y respeto. Durante estas procesiones, los creyentes pueden recitar oraciones, cantar himnos y participar en momentos de silencio y reflexión.

En Panamá, el Viernes Santo es celebrado con diversas manifestaciones religiosas. Una de las tradiciones más destacadas es la procesión del Santo Entierro, que tiene lugar en la ciudad de Panamá y en otras localidades del país. Durante esta procesión, los fieles llevan en hombros imágenes que representan a Jesús crucificado y a la Virgen María, acompañados de otras imágenes relacionadas con la Pasión de Cristo. La procesión es una muestra de fe y devoción, y miles de personas participan en ella, vistiendo de luto y acompañando las imágenes en su recorrido por las calles.

Hoy viernes santo, Sertv transmitre “Semana Santa viviente” en directo desde Pesé, provincia de Herrera, desde las 4 pm, una tierra de cultura, tradición y fe que escenifica un drama que nos cambia la vida cada año, ya que celebran una obra magistral que despierta todos los sentidos. Una tradición que además es una de las primeras manifestaciones de turismo religioso del país, ya que atrae a más de 25 mil visitantes, y empezó con la llegada del sacerdote José Luis Ángulo a la Parroquia San José de Pesé. Era el año de 1954 cuando el sacerdote vio que los parroquianos tenían dotes para el teatro y propuso hacer una dramatización del vía crucis en Semana Santa.

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Otra tradición asociada al Viernes Santo es el ayuno y la abstinencia. Muchos creyentes cristianos observan el ayuno como una muestra de solidaridad con el sufrimiento de Jesús en la cruz, renunciando a ciertos alimentos o actividades durante este día. La abstinencia, que implica abstenerse de comer carne, también es común en el Viernes Santo, como un gesto de sacrificio y penitencia.

Además de la procesión, en el Viernes Santo se realizan otras actividades religiosas, como la celebración de la Pasión del Señor en las iglesias, donde los fieles meditan sobre los sufrimientos de Jesús durante su crucifixión y la importancia de su sacrificio en la redención de la humanidad. También se llevan a cabo estaciones del Viacrucis, que es una representación simbólica del camino que recorrió Jesús cargando la cruz hasta su crucifixión. Estas estaciones son lugares donde los fieles se detienen a meditar y orar sobre los diferentes momentos de la Pasión de Cristo.

Además de las prácticas religiosas, el Viernes Santo también es un día de reflexión sobre la importancia del sacrificio, el perdón y la redención en la vida cotidiana. Se anima a los creyentes a reflexionar sobre sus propias acciones y actitudes, y a buscar la reconciliación con Dios y con los demás. Es un momento para recordar la importancia del amor, la compasión y la humildad, valores que Jesús enseñó a través de su vida y ejemplo.

Es importante destacar que la celebración del Viernes Santo varía en diferentes partes del mundo y dentro de las diversas denominaciones cristianas. Algunas comunidades realizan representaciones teatrales o dramatizaciones de la crucifixión, mientras que otras enfocan más en la meditación y reflexión propia de la fe cristiana.

Es importante destacar que el Viernes Santo no es solo una conmemoración religiosa, sino también una oportunidad para reflexionar sobre el significado profundo del sacrificio de Jesús en la cruz. Para los creyentes, representa el amor incondicional de Dios hacia la humanidad y la esperanza de la salvación. Además, el Viernes Santo también es una ocasión para valorar y practicar la solidaridad, la compasión y la generosidad hacia los demás, siguiendo el ejemplo de Jesús en su entrega y sacrificio por el prójimo.